Cambiando el foco

A veces pasa que llegamos a una edad donde mirando hacia atrás nos inunda la nostalgia de sueños, de ilusiones que no hemos cumplido, o el desconcierto de ¿y por qué no se han cumplido mis sueños?

O incluso, en el propio trabajo, con los compañeros, gestionando equipos y percibimos que algo se nos escapa, que todavía puedo aprender más y saber más.

A veces puede llegar el momento en el que me bloqueo, y no sé por qué, y que la razón se queda corta en este sentido.

Si has llegado a ese punto de inflexión en tu vida, donde quieres ser la mejor versión de ti mismo, desarrollando el liderazgo, la asertividad, la empatía, la regulación emocional, y el trabajo en equipo, este es tu programa.

Muchas veces queremos evitar el conflicto, por desagradable o porque ya no nos merece la pena, y así el amor entra en una etapa fría, gélida, que le da fragilidad y lo hace resbaladizo. Tal vez no sepáis cómo habéis llegado a esto, nada trágico o catártico os ha pasado, pero el caso es que ahí estáis, compartiendo casa pero sin esa potencia del principio, sin ese brillo en los ojos, en definitiva, sin conectar.

No os conforméis con sobrevivir, es tiempo de empezar a vivir, de acompañar, de caminar juntos, porque muchas veces no es falta de amor, pero, ¿de qué sirve tener un buen mensaje de amor si no somos capaces de hacérselo llegar al otro?

Es momento de cambiar, es momento de cambiar el foco, de optar por conectar, por empatizar, por desarrollar la inteligencia emocional y esto repercutirá en todas las etapas de vuestra vida, ¿os animáis a cambiar el foco?.

Muchas veces queremos evitar el conflicto, por desagradable o porque ya no nos merece la pena, y así el amor entra en una etapa fría, gélida, que le da fragilidad y lo hace resbaladizo. Tal vez no sepáis cómo habéis llegado a esto, nada trágico o catártico os ha pasado, pero el caso es que ahí estáis, compartiendo casa pero sin esa potencia del principio, sin ese brillo en los ojos, en definitiva, sin conectar.

No os conforméis con sobrevivir, es tiempo de empezar a vivir, de acompañar, de caminar juntos, porque muchas veces no es falta de amor, pero, ¿de qué sirve tener un buen mensaje de amor si no somos capaces de hacérselo llegar al otro?

Es momento de cambiar, es momento de cambiar el foco, de optar por conectar, por empatizar, por desarrollar la inteligencia emocional y esto repercutirá en todas las etapas de vuestra vida, ¿os animáis a cambiar el foco?.

Y de repente, lo que parecía tan obvio, que lo necesitabais como el comer, que lo echabais en falta, se convierte en un estorbo, en un no saber convivir, en no saber estar…

En caer en la cuenta de que, si bien no hay ningún PROBLEMA con mayúsculas sí parece que el otro es un extraño, que las crisis personales os han afectado más de lo que estáis dispuestos a aceptar, o simplemente que tenéis avanzar , sabéis que verdaderamente podéis conectar, si os acompañan a saber cómo.

Pues eso es un programa de cambiando el foco, el aprender herramientas concretas y eficaces de comunicación empática y respetuosa, para que tú mensaje, sea cual sea, llegue al otro, de manera, clara, limpia y comprensible, para facilitar que el otro lo acepte.

Vive que el “si cambias tú, cambia todo”

El querer hacerlo bien, la responsabilidad, el amor, la soledad, la frustración, la alegría, la calma, el anhelo… son muchas emociones juntas que potencian o entorpecen nuestro camino. Reconocerse el espejo en el que se miran tus hijos es motivador y genera mucha responsabilidad.

Todos hemos oído, incluso, hemos llegado a estar de acuerdo que a través del grito, del menos precio, del victimismo o del autoritarismo no se educa, no se acompaña, no se construye, pero el día que en el trabajo hemos tenido un problema, los niños se encuentran más nerviosos por cualquier circunstancia, no he sabido conectar con mi pareja y el agotamiento, la frustración, la rabia se apoderan de mí el grito parece la única solución.

Muchas veces no es falta de amor, es falta de herramientas, concretas y eficaces para llegar al otro, es falta de inteligencia emocional y de asertividad, errores en la comunicación que nos dificultan la convivencia.

Los dos educáis, y si bien la diferencia es maravillosa, cuando se trata de educar, de acompañar en el crecimiento parece que nos cuesta encontrarle  esas bondades, ese punto de unión, si bien tenemos claro que “los niños se miran en el espejo de sus padres”, por eso es tan necesario que ambos, cambiéis el foco.

Estás en el momento de cambiar las cosas, de cambiar el foco, de que tanto tú, como tú familia os comuniquéis de una forma empática, respetuosa, que conecta, porque tú tendrás que aprenderlo, pero tus hijos lo “mamarán” de ti.

El mundo va a un ritmo que muchas veces no sabemos seguir y cuando nuestros hijos entran en la adolescencia, los miedos, la incertidumbre, la desesperación o incluso la rabia nos acechan.

Miedo a no saber hacerlo, a no seguir su ritmo, a sentir que todo en la sociedad “deseduca”, incertidumbre ante ¿qué va a pasar? ¿cómo es ahora la adolescencia?

Nos desespera pensar que no llegamos a entenderlo del todo, que qué hemos hecho mal con nuestros hijos, por qué ahora nos “pagan” de esta manera.

E incluso la rabia de no merezco esto, yo no he estado ahí toda su niñez para que ahora me trate así, para que me salga con estas o me haga daño.

Las amistades, los estudios, las decisiones que debe tomar, las compañías, el sexo, el amor… Si alguno de estos sentimientos te ha abordado alguna vez, si alguna vez te has sentido perdido, sin rumbo, y sin saber ya qué más decir o hacer para poder navegar por el rio de la adolescencia de tus hijos, tal vez ha llegado el momento de aprender a cambiar el foco, de aprender herramientas concretas y eficaces para desarrollar la inteligencia emocional y con ello conectar con tus personas favoritas.

Tienes una vocación, te sentiste llamado a acompañar, cuidar, instruir, trasmitir y educar a generaciones de niños y adolescentes para caminar con ellos a dar pasos desde la niñez hasta su encuentro consigo mismos, hacia la edad adulta, pero sientes que las cosas o no son como las habías imaginado o ya no son como antes.

Los chavales tienen cada vez dificultad para concentrarse, para afrontar la frustración o asimilar el éxito, para tomar decisiones, para responsabilizarse, para superar el bloqueo emocional que las situaciones concretas de la vida les está generando.

Actualmente, ser profesor se convierte en una profesión con retos inéditos cuyo objetivo es hacer de bisagra entre el mundo educativo y las cortoplacistas y el mundo familiar e interior de los chavales.

Si quieres aprender cómo ser catalizador de personas, como enseñarle motivación, autonomía, autoestima, regulación emocional y muchas otras habilidades, si quieres aprenderlas para ti, para mejorar el ambiente en el aula, la confianza en ti mismo y la seguridad de estar conformando a la persona, este es tu programa.